sábado, 9 de enero de 2016

El día después

Les aseguro que a todos les paso, o quiero creer que no soy la única.


 Sentía que ya estaba, que se iba, que todo se había terminado. Sin discusión, sin pelea, sin un adiós. No lo quería aceptar, necesitaba saber que todo seguía igual. Quería negar la realidad. 

Aunque si pienso un segundo, no se puede perder algo cuando no se tiene nada, cuando en realidad no eramos nada. Solo dos personas, con momentos en común, charlas hasta la madrugada a través de una pantalla, noches sin sueños, y demasiados desencuentros.


Y si, llega el momento indicado de perder la dignidad.


Todo estaba dado, para que haga lo que al otro día iba a querer olvidar.

Viernes, amigas, salida, alcohol, celular, y SU número. 


Lo llamé. 


Hice el peor error que toda adolescente puede cometer. Un error sin consultar con amigas, porque no quería escuchar lo que me iban a decir. Simplemente, un impulso.


 Y al otro día, lo mas doloroso. La caída. El arrepentimiento. 


Miré el celular deseando ver un mensaje. Queriendo sentir que la perdida de dignidad, había logrado recordarle que existía. 


- Estas bien? Paso algo? 


Y solo podía sonreír, una sonrisa con mezcla de nervios, felicidad y ganas de volver el tiempo atrás. 


Había logrado lo que estaba buscando. Saber por un segundo, que esa persona a la que le dedicaba todo mi día pensando en cosas que jamas iban a pasar, se había preocupado por mi. 


Era el momento de contestarle, necesitaba una buena excusa que oculte un hermoso error. Pensé, mil cosas, sabiendo que después no iba a contestarme más. 


Como siempre mi amiga cómplice, a la que le pedí ayuda desesperada, me bajo a la Tierra. Y me dio una respuesta perfecta.Y finalmente logré más de lo que esperaba. 


A veces esta bueno tirarse de un precipicio, arriesgarse y dejarse caer, a veces el paracaídas funciona y la caída es hermosa.

4 comentarios:

  1. Una situacion por la que pasamos todos, tirarnos sin saber que hay, me encanto. http://unamiradaytodo.blogspot.com.uy/ Por si te interesa, saludos

    ResponderEliminar
  2. Y qué pasa cuando el paracaídas no se abre s tiempo y derrochas lo ultimo que te quedaba de dignidad en vano? Particularmente me cansé de tirarme a la pileta porque siempre termina estando vacía. Concuerdo con lo que decís a veces funciona. A VECES. No sé, a mi se me fueron las ganas de darmela contra el pavimento, es más, no creo que me haya funcionado nunca.

    Bueno blog.
    Pasá si te interesa: otraalmaenpena.blogspot.com

    ResponderEliminar